El cambio climático se refiere a las transformaciones a largo plazo en el clima del planeta debido, principalmente, al aumento de gases de efecto invernadero causados por actividades humanas como la quema de combustibles fósiles y la deforestación. Estas alteraciones no solo elevan la temperatura global, sino que intensifican fenómenos como el aumento del nivel del mar, las tormentas fuertes y la escasez de agua.
En un país insular como República Dominicana, donde gran parte de la población y la economía dependen del litoral, estos efectos se sienten con mayor intensidad.
¿Por qué es importante para el país?
Las costas dominicanas no solo son el corazón del turismo nacional, sino también el hogar de comunidades pesqueras, barreras naturales como manglares y arrecifes, y fuentes de sustento económico. Cuando el mar avanza, las tormentas arrecian o el agua dulce se contamina con sal, no solo se pierde arena: se pone en riesgo la seguridad alimentaria, el empleo y la infraestructura del país.
Impactos principales ya documentados
1. Aumento del nivel del mar y erosión de playas
El Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (UNEP) advierte que “sea-level rise will likely exacerbate coastal flooding and beach erosion”. El Plan Nacional de Adaptación al Cambio Climático (PNACC-RD 2015-2030) prioriza la restauración de manglares y dunas como defensa natural. Varias playas del país ya muestran retrocesos visibles, afectando hoteles, viviendas y vías costeras.
2. Tormentas más intensas e inundaciones
El Banco Mundial alerta que para 2050 el cambio climático impactará gravemente la infraestructura y los ecosistemas costeros. Entre 2010 y 2020, las muertes por eventos extremos fueron 15 veces más frecuentes en zonas vulnerables, según el PNUD. Las marejadas y lluvias torrenciales ya causan daños recurrentes en muelles y comunidades ribereñas.
3. Intrusión salina y escasez de agua dulce
El UNEP señala que la intrusión de agua salada “impactará la calidad del agua para uso residencial, agrícola y turístico”. Esto compromete pozos, cultivos cercanos a la costa y el suministro para hoteles y comunidades.
4. Riesgo para el turismo y la biodiversidad marina
Arrecifes coralinos y hábitats submarinos clave están bajo presión, afectando la pesca y el atractivo turístico. El Programa de Alojamiento de Bajo Carbono del país busca reducir emisiones del sector hotelero, reconociendo su vulnerabilidad frente al clima.
¿Qué se puede hacer?
Para proteger las costas dominicanas se requieren acciones urgentes y coordinadas:
- Restaurar manglares, arrecifes y dunas como defensas naturales.
- Monitorear constantemente la línea costera y la calidad del agua.
- Regular la construcción en zonas de riesgo.
- Involucrar a las comunidades costeras en la gestión ambiental.
- Integrar criterios climáticos en el turismo, la pesca y la infraestructura.
Las evidencias son claras: el cambio climático ya está afectando las costas dominicanas. No se trata de un problema futuro, sino de un desafío actual que amenaza vidas, empleos y ecosistemas. Con planificación basada en la ciencia y participación comunitaria, el país puede proteger su patrimonio natural y garantizar un desarrollo más seguro y sostenible.
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