La economía circular es un modelo de producción y consumo que busca reducir al mínimo los residuos y aprovechar al máximo los recursos existentes. Según la Fundación Ellen MacArthur, pionera en este enfoque: “La economía circular es un sistema regenerativo en el que los recursos se mantienen en uso el mayor tiempo posible, se extrae el máximo valor de ellos mientras están en uso y luego se recuperan y regeneran productos y materiales al final de cada ciclo de vida”.
¿Cómo se diferencia de la economía lineal?
El modelo económico tradicional o economía lineal se basa en “extraer – producir – usar – desechar”. La economía circular rompe con este esquema, proponiendo un ciclo que incluya:
- Reducir: el consumo de recursos y generación de residuos.
- Reutilizar: alargar la vida útil de productos y materiales.
- Reciclar: transformar residuos en materias primas para nuevos productos.
- Regenerar: devolver nutrientes a la naturaleza cuando sea posible.
Marco en República Dominicana
La Estrategia Nacional de Desarrollo 2030 (Ley 1-12) incorpora el principio de sostenibilidad y transición hacia la economía circular. Asimismo, el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MMARN) define economía circular como: “Un sistema de aprovechamiento de recursos donde prima la reducción, la reutilización y el reciclaje de los elementos, a diferencia del modelo tradicional de usar y tirar”.
En 2022, el MMARN y el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) lanzaron la Hoja de Ruta Nacional hacia la Economía Circular, que propone políticas públicas y alianzas con el sector privado para implementar este modelo en los próximos años.
Ejemplos locales de economía circular
- Reciclaje de metales y chatarra
Empresas como IMCA Reciclaje y Metales Antillanos recuperan metales de desecho para fundición y exportación, evitando su disposición en vertederos y reduciendo la extracción de minerales vírgenes. - Industria del cemento
La Asociación Dominicana de Productores de Cemento Portland (ADOCEM) promueve la economía circular mediante el coprocesamiento de residuos industriales como combustibles alternos, reduciendo así el uso de combustibles fósiles y la disposición de residuos. - Larimar y ámbar
Artesanos de Barahona y Santiago reutilizan recortes de larimar y ámbar para elaborar joyería y accesorios pequeños, reduciendo desperdicios en los talleres lapidarios. - Proyecto ‘EcoEscuelas’
Impulsado por el MMARN y el PNUD en centros educativos para crear huertos, compostaje y reciclaje escolar, enseñando a niños y jóvenes la importancia de cerrar ciclos de materiales. - Iniciativas en zonas turísticas
Hoteles en Punta Cana y Bávaro implementan programas de compostaje de desechos orgánicos y reutilización de plásticos, alineados con la Estrategia Nacional de Producción y Consumo Sostenible.
Beneficios de la economía circular
De acuerdo con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID): “La economía circular puede aumentar la competitividad, crear nuevos empleos y proteger el medio ambiente mediante la innovación en procesos, productos y modelos de negocio”.
En República Dominicana, su implementación contribuiría a reducir la presión sobre vertederos, mejorar la gestión de residuos, disminuir emisiones de gases de efecto invernadero y diversificar la economía con nuevos sectores de reciclaje y valorización de desechos.
La economía circular es un modelo clave para el desarrollo sostenible, ya que transforma la forma en que producimos y consumimos, evitando el desperdicio y regenerando los recursos naturales. En República Dominicana, su avance depende de la integración entre Estado, empresas y ciudadanos, como parte de la ruta hacia una economía más competitiva, inclusiva y respetuosa del medio ambiente.
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